LOS TOLKIEN Y SU LEGADO... II
Seguimos con la biografía de J.R.R. Tolkien y algunos flashes de sus escritos.
En medio de los avatares de la vida, los Tolkien se van haciendo mayores.
En 1963, un 22 de noviembre, muere su gran amigo C.S. Lewis... Esto le llegó al alma; decía que estaba acostumbrado a que se le fueran cayendo las "hojas", como a un árbol viejo, que tanto le gustaban, pero la muerte de su amigo había sido como "un hachazo en sus raíces". Pasó mucho tiempo con un profundo dolor, en silencio, meditando y releyendo el último libro de Jack.
En 1966 celebra con Edith las Bodas de oro por todo lo alto. Disfrutan de los hijos y nietos: de la familia que no tuvieron de niños... En esa época su amor había madurado y mejorado, y estaba muy pendiente de cuidar a Edith y hacerla feliz, pues tenía problemas de salud y le iba mal el ambiente tan húmedo. En 1968 se van a vivir a Bournemouth, una localidad costera al sur de Birmingham para que ella se encontrara mejor, a pesar de tener que renunciar a su ambiente de Oxford. Sabía que en el amor auténtico, con destellos de inmortalidad, a veces hay que renunciar a algo apetecible por el bien del otro... Te lo contaré en otro post sobre el amor.
Además tenían el mar cerca, que a Ronald le cautivaba. Y allí hacen muchos amigos. A esta edad se va haciendo más reflexivo, y muchas veces se encuentra meditando sobre la coherencia de sus historias y la realidad metafísica que intenta transmitir, dandole forma.
Ya publicado el Hobbit, y parte de El Señor de los Anillos, le llega la fama de sus libros y la "fortuna", pero sigue con su ritmo sencillo de vida, necesitando pocas cosas, y siendo muy generoso con todos. Tenía que dedicar mucho tiempo a contestar cartas de la gente, aceptar invitaciones de Universidades... etc.
Al final de su vida, caminaba con Edith por el bosque, bien cogidos de la mano, esquivando la sombra de la muerte... antes de su última despedida.
Un día recibe una carta invitándole a prorrogar un libro de un amigo, George MacDonald, y sin querer le sale un nuevo "cuento": El herrero de Wootton Mayor, que refleja un poco su vida. Habla del reino de Fantasía, y que tiene que entregar la "estrella" de la inspiración a otros aprendices... para que pongan lo que falta. Sencillez y humildad, dejando su obra de arte para que otros la "completen".
Le invade una sensación de nostalgia y soledad, de que se acerca el final... Y en medio de todo eso, corría el año 1971, la muerte de Edith sin previo aviso. Su amor romántico y eterno. Ahí concluye en la Tierra Media la historia de Beren y Lúthien, que llegará hasta el epitafio de su tumba en Oxford. Pero, al otro lado la blanca orilla, dice Gandalf. Y "...del otro lado hay más que recuerdos."
Namárië!
Logra reponerse a duras penas, y vuelve al ambiente de Oxford. Sabe que tiene que ir acabando su mitología pero parece un imposible por la cantidad de material, versiones, dibujos, que sigue creando... Trabaja con su hijo Christopher en ello, pero no avanza mucho. En medio de esas revisiones, también fallece. Lo entierran al lado de Edith, en un cementerio de Oxford, en una tumba común con los nombres de Lúthien y Beren.
Después de su muerte, su hijo Christopher, que había crecido inmerso en su mundo legendario, se puso a trabajar, seleccionar y organizar sus escritos y dibujos. Publicó una serie de obras basadas en las amplias notas y manuscritos inéditos de su padre, entre ellas El Silmarillion, su gran obra, que no pudo verla editada. Y alguna más, como Los hijos de Húrin, Árbol y hoja, y algunas Cartas seleccionadas y recopiladas.
Todos los relatos del Silmarillion, junto con El hobbit y El Señor de los Anillos, forman un cuerpo conectado de historias, con poemas e idiomas propios inventados, donde se pueden hablar esos idiomas de forma "encantada", y dan vida a las situaciones narradas.
Comienza con un mundo creado, Arda, y más en concreto sobre uno de sus continentes: la Tierra Media. Tolkien denominó con la palabra legendarium a todos esos escritos. En ellos había muchos tipos de razas: Elfos, los primeros nacidos, artistas inmortales, con sus largos años sobre la Tierra, Hombres, destinados a morir, que ansían el poder y anhelan la inmortalidad, Medianos, con corazón sencillo y generoso, Orcos, antiguos elfos corrompidos por el Señor Oscuro, carentes de libertad, Espectros, vacíos y retorcidos, Magos o Istari, con gran sabiduría, como Gandalf, Radagast, o Saruman..., con misiones altas y concretas, Ents o Pastores de árboles..., pausados, cuyo nombre significa toda una historia, y requiere mucho tiempo decirlo pues está siempre creciendo...
Sin embargo, toda su obra no pretende ser una alegoría de nada, como algunos pueden creer, sino auténticas historias, que más bien reflejan acciones humanas de la vida cotidiana. Prefería que cada lector se "asomara" como en un espejo, y viera lo que le sugiriera, y no tanto con un mensaje ya dado, invariable, recortado y empequeñecido. Te lo cuento en el post "el espejo de Galadriel". Así deja libertad al lector, y se pueden reflejar un sin fin de posibilidades.
Todas sus historias están llenas valores hondamente humanos, como toda historia bien narrada. Por ejemplo, la amistad y lealtad de los Hobbits y de otras razas, la deslealtad y traición de Saruman, la bondad y buen consejo de Gandalf, la inmortalidad de los Elfos y el "don" de la mortalidad de los Hombres, el amor eterno que refleja en la historia de Beren y Lúthien, o la de Aragorn y Arwen, el gran don de la libertad de los pueblos de la Tierra Media..., y de cada personaje ante su misión, algo que los Orcos no tienen. Ni los Espectros..., esclavos del Señor Oscuro; ni vivos ni muertos. Atrapados.
Pero sobre todo transmite belleza por doquier, arroja luz y aporta sentido a la realidad, y nos interpela de algún modo a cada uno con su obra artística, con sus palabras detenidamente pensadas cada una, y su bonita sonoridad. Verdaderas y llenas de significado. Conecta con los anhelos del corazón humano, con los deseos de pervivir que todos tenemos: nuestro para qué de la vida, más allá de "los círculos de este mundo".
Y contienen una ética, implícita, como los "cuentos de hadas", cuya filosofía compartía con G. K. Chesterton. Leyendas para su querida Inglaterra, como cuenta en su Carta 131, que configuran el espíritu de un pueblo y nunca deben caer en el olvido... "Canciones" que recopilan la tradición y el saber arcano y valioso de los que precedieron, digno de ser recordado.
Luego dirá en Las Cartas de JRR Tolkien, Carta 181:
"No hay especial referencia a Inglaterra en la «Comarca», salvo, por supuesto, que como inglés criado en una aldea «casi rural» de Warwickshire, junto a la próspera burguesía de Birmingham (¡por el tiempo del Diamond Jubilee!), tomo mis modelos, como cualquier otro, de la «vida» tal como la conozco."
***
Comento algunas ideas de sus libros para animarte a disfrutar de su lectura pausada y su belleza y esperanza por doquier.
1) “El Silmarillion"
Es la primera historia subcreada en el tiempo, y la más elevada y compleja. Precede a los dos libros más conocidos, aunque conecta con ellos. Comenzó en 1917 con unas anotaciones en una libreta en las trincheras de la gran Guerra, con la Caída de Gondolin y el libro de los Cuentos Perdidos. Más tarde se llamará El Silmarillion, editado por su hijo Christopher. Te lo contaré en post aparte.
Describe la creación del Universo por Eru, Ilúvatar para los Elfos, las Dos Lámparas que daban luz a todo el mundo, los "Días Antiguos" y los Dos Árboles de Valinor que cantó Yavanna, la Primera Edad del Sol..., y los Hijos de Ilúvatar.
Al principio Eru crea a los Ainur, vástagos de su pensamiento, que son seres espirituales, sagrados y sujetos a Él. Les anima a que toquen música para Él, algo que anhelan. Y logran una armonía llena de belleza. Pero, uno de ellos, Melkor, levanta el tono y lo hace de forma discordante.Y lo repite durante tres veces. Solo ansía tener preponderancia sobre los otros.
Muchos conocen a Ilúvatar y lo aceptan, inclinándose, y otros se van con Melkor. Y Eru, Iluvatar, habla...
Dejo una pequeña cita:
"Entonces Ilúvatar habló, y dijo: –Poderosos son los Ainur, y entre ellos el más poderoso es Melkor; pero sepan él y todos los Ainur que yo soy Ilúvatar; os mostraré las cosas que habéis cantado y así veréis qué habéis hecho. Y tú, Melkor, verás que ningún tema puede tocarse que no tenga en mí su fuente más profunda, y que nadie puede alterar la música a mi pesar. Porque aquel que lo intente probará que es sólo mi instrumento para la creación de cosas más maravillosas todavía, que él no ha imaginado.”
..."cuando llegaron al Vacío, Ilúvatar les dijo: —¡Contemplad vuestra música!—. Y les mostró una escena, dándoles vista donde antes había habido sólo oído; y los Ainur vieron un nuevo Mundo hecho visible para ellos, y era un globo en el Vacío, y en él se sostenía, aunque no pertenecía al Vacío. Y mientras lo miraban y se admiraban, este mundo empezó a desplegar su historia y les pareció que vivía y crecía. Y cuando los Ainur hubieron mirado un rato en silencio, volvió a hablar Ilúvatar: —¡Contemplad vuestra música! Este es vuestro canto y cada uno de vosotros encontrará en él, entre lo que os he propuesto, todas las cosas que en apariencia habéis inventado o añadido. Y tú, Melkor, descubrirás los pensamientos secretos de tu propia mente y entenderás que son sólo una parte del todo y tributarios de su gloria."
El Silmarillion, Ainulindalë. Ed. Minotauro.
La creación de la Luz: al principio hay innumerables estrellas que iluminan Arda. Algunos de los Ainur que bajan a la Tierra, los Valar, viven en el centro de Arda. El Vala Aulë construye dos grandes Lámparas y Varda las llena, y Yavanna las consagra. Así iluminan todo como un día inmutable... Pero Melkor las destruye causando grandes desastres.
Y los Valar se retiran a Valinor. Ahí Yavanna canta con poder y hace brotar los Dos Árboles de luz en un montículo en Valinor. Uno con luz plateada, Telperion, otro dorada, Laurelin que se van alternando. Pero acontece su destrucción por el mismo ser discordante.
Yavanna y Nienna recogen la última flor y el último fruto de los Dos Árboles, que darán lugar a la Luna y el Sol.
Luego la creación de Estrellas por Varda para los Elfos, los Primeros Nacidos... etc.
Y el mundo de los Hijos de Ilúvatar: Elfos, y Hombres: los Segundos Nacidos en la Edad del Sol.
Y se narran los hechos de los Elfos Eldar, que van a vivir a Valinor invitados por los Valar, y los Avari, que permanecen en la Tierra Media; y de luchas entre ellos...
El mayor artista elfo, Fëanor, hijo del Rey elfo Finwë, y gran orfebre, crea tres gemas preciosas: los Silmarils que contienen la Luz primigenia de los Árboles de Valinor, antes de que fuesen destruidos por Melkor, el Señor Oscuro.
Y las guerras que se sucedieron para rescatarlos y vengarse a toda costa: luchas entre los propios Elfos, asesinatos, codicia, odio. Y la maldición de Mandos que perseguirá a los Noldor muchas generaciones con su desgracia y muerte, y los conduciría a una progresiva decadencia.
Y el despertar de los Hombres, los Segundos Nacidos, "destinados" a morir... Los "forasteros" de Arda.
Algunos de los Elfos que tomaron parte en antiguos tiempos y contiendas, como la Dama Galadriel y el Caballero Elrond, también son importantes en el Señor de los Anillos pues viven largos años: están unidos a los círculos de mundo... Solo pueden morir en la guerra, o por melancolía, algo mucho más doloroso y triste.
Galadriel es una Dama Elfa, hija de Finarfin, casada con Celeborn, Señores del bosque de Lothlórien, portadora y guardiana de uno de los Tres Anillos de los Elfos: Nenya. Y el Caballero Elrond, de los Edain, que elige el linaje elfo y se casa con Celebrían, hija de Galadriel y Celeborn. Y tendrán dos hijos y una hija que será la Dama Arwen, principal en la Tercera Edad y futura esposa de Aragorn, heredero de Isildur.
Elrond, hijo de Eärendil, que rescató un Silmaril y pidió perdón a los Valar, es un personaje que "atraviesa" todo el Legendarium: desde el Silmarillion hasta los Puertos Grises de El Señor de los Anillos.
En este libro se encuentra la maravillosa historia de Beren y Lúthien Tinúviel: el romance central de su obra. Lúthien es una dama élfica descendiente del Rey elfo Elwë, que se llamará Thingol, y una Maia: Melian. Quiere compartir su amor con Beren: un hombre. Ambos lucharán contra el Señor Oscuro para recuperar una de esas joyas o Silmarils de su Corona de Hierro y poder unirse para siempre. Algo bastante impensable, intrépido y peligroso, para lo cual necesitarán todo su ingenio y la colaboración de amigos...
Tolkien escribirá: "Nunca llamé Lúthien a Edith, pero ella fue la fuente de la historia que con el tiempo se convirtió en la parte principal del Silmarillion. Fue ideada por primera vez en el claro de un pequeño bosque lleno de plantas de cicuta en Roos, en Yorkshire." En ese bosque paseaban y ella bailaba para él... Ahí expresa lo que es un amor verdadero, cuidado cada día, y mucho más fuerte que sentimiento, llamado a perdurar para siempre.
Más tarde, la Segunda Edad y la Isla de Númenor, con Nimloth, el Árbol Blanco, un símbolo viviente que recuerda a Telperion, uno de los Árboles de Valinor. Pero sus habitantes se rebelan contra Eru, Ilúvatar, y la Isla acaba hundida y devastada.
Más tarde será la forja de los Anillos de Poder.
2) "El Hobbit"
Sigue en el tiempo "El Hobbit”, que comienza en una página en blanco de unos exámenes, en 1920.
"En una hoja en blanco garabateé la frase: «En un agujero en el suelo vivía un hobbit». No supe entonces por qué, y sigo sin saberlo (…) Los nombres siempre generan una historia en mi mente. Pensé que más tarde haría bien en descubrir cómo eran los hobbits".
Una cita de Joseph Loconte: Un Hobbit, un Armario y una Gran Guerra.
Pronto se sucederán más preguntas que exigen respuestas: ¿qué es un hobbit...? Va creando la historia desde las palabras, lo que significan y las historias que entrañan.
El libro trata de la aventura de un habitante de la Comarca, con grandes praderas y verdes pastos, que le gusta la vida sencilla y tranquila del campo, la buena comida y la cerveza, como a todos los hobbits.
Los Hobbits son unas criaturas pequeñas, sosegadas, alegres, que les entusiasma la diversión y la amistad, disfrutan y cuidan la naturaleza, "lo que crece y vive", y un poco "perezosas": jamás se aventuran ni hacen nada inesperado... El protagonista es Bilbo Bolsón, y gracias a esa aventura que inicia, animado por Gandalf y trece enanos, crece y conquista algo que ni hubiera podido imaginar. Se supera a sí mismo y tiene un papel importante en la historia del Anillo. Es uno de los Portadores.
Comenzó como un cuento sencillo para sus hijos, que les contaba antes de dormir, y luego escribiría por las noches, a veces en el garaje, convertido en estudio. Pero luego empezó a complicarse la historia, al ampliarla y conectarla hacia el Señor de los Anillos.
Dejo un fragmento sobre los Hobbits, del Prólogo de El Señor de los Anillos:
"Los Hobbits son un pueblo sencillo y muy antiguo, más numeroso en tiempos remotos que en la actualidad. Amaban la paz, la tranquilidad y el cultivo de la buena tierra, y no había para ellos paraje mejor que un campo bien aprovechado y bien ordenado"...
Nuestro autor se consideraba un Hobbit: le gustaba la naturaleza y en especial los árboles. Decía en una de sus cartas: "Soy, de hecho, un hobbit (salvo en el tamaño). Me gustan los jardines, los árboles, y las tierras de cultivo no mecanizadas; fumo en pipa y me agrada la buena comida sencilla... me gustan y hasta me atrevo a ponerme en estos días aburridos chalecos ornamentales. Soy aficionado a las setas; tener un sentido del humor muy simple; me acuesto tarde y me levanto tarde (cuando es posible). No viajo mucho.”
3) "El Señor de los Anillos"
Esta obra prosigue con "El Señor de los Anillos", la más extendida, que le llevó muchos años de dedicación. Doce en concreto. Y luego más con revisiones... También muy conocida porque se ha llevado a la gran pantalla por Peter Jackson, en New Line Cinema.
El marco de referencia procede de la Tercera Edad de El Silmarillion y los Anillos de Poder. Y el nexo de unión es el Anillo, que pasa de mano en mano hasta encontrar un nuevo dueño al que embaucar... Y Bilbo Bolsón, el tío de Frodo, que encontró el Anillo perdido por Isildur.
Le costó muchos años trabajarlo, y gracias al aliento de sus amigos, especialmente de C. S. Lewis, logró retocarlo y mejorarlo día a día. También por su hijo Christopher que le cautivaba su creación. Incluso, cuando estaba en Sudáfrica en la Segunda Guerra Mundial, le enviaba lo que iba escribiendo... y él le comentaba lo que le parecía. Lo termina de escribir y pasar a máquina en 1949. Y al fin se publica en 1954, después de muchas dificultades de las editoriales, dificultades económicas, falta de papel, y una crítica oficial, fantástica y revolucionaria, por parte de C. S. Lewis precisamente.
El trabajo creativo precisa tiempo, investigar..., averiguar mil cosas que, como él decía, tenía que descubrir. De ahí sus muchas versiones y correcciones de sus obras, hasta que veía que le quedaban con coherencia interna. Además, crecían constantemente en su interior. También por su meticulosidad y delicadeza, por sus miles de detalles para hacer muy reales todas las historias.
En su libro Hoja, de Niggle, que te cuento en ese post, refleja un poco la naturaleza de la fantasía y su forma de trabajar e "inventar". Pero decía con sencillez que era algo que ya estaba ahí, que no tenía la noción de "inventar" nada sino de "descubrir", que es lo que significa esa palabra. Además, con el tiempo, las historias se enriquecían en su imaginación, crecían, lo cual le llevaba a buscar respuestas, a retocar y ampliar. A buscar nuevas versiones y redibujar los pormenores de cada historia. Su hijo le ayudaba con tesón, también a dibujar el mapa de la Tierra Media, a mayor escala, que tenía siempre a la vista.
En esta obra acontecen y describe una serie de relatos y aventuras relacionadas con el Anillo Único de poder para gobernar el mundo, que se apodera de los corazones de los Hombres y demás personajes. Una lucha por la libertad y otros valores como la lealtad, la amistad y el amor, el honor y el sacrificio. Y siempre, esperanza... a pesar de que una sombra y oscuridad se cierne por toda la Tierra Media.
Pero el trasfondo cautivador está en la belleza que crea y transmite, en ese mundo tan maravilloso que interpela a cada uno con su belleza y conecta con los anhelos del corazón humano. Y lo hace a partir de las palabras, como buen filólogo. El tema central, la mortalidad del ser humano, con sus anhelos de no morir, de permanecer, como los Elfos, con sus largos años sobre la Tierra... Con un tiempo finito. Y esta mortalidad es un "don" pues no están atados a todas las Edades del mundo.
Por eso, la forma de permanecer es ser capaces de acciones memorables, dignas de ser recopiladas en "canciones", que pasen a generaciones venideras, pues poseen la sabiduría arcana.
En este libro tienen un papel esencial los Hobbits: esas criaturas casi insignificantes que siempre sorprenden. Y estará en sus manos el destino del mundo. Cuentan con amigos leales que no les dejan solos, y ponen su vida a su servicio: la Compañía del Anillo. Gandalf, sabio y buen consejero, Trancos, cuyo linaje atesora, un Elfo, Boromir, capitán de ejércitos, Hobbits amigos, un Enano: Gimli..., que quedará "tocado" por la Luz y la belleza de la Dama Galadriel. Juntos lucharán contra el mal que se revuelve en Mordor y sus Espectros, con sus pequeñas acciones libres, heroicas, constantes, apuntando a su misión. La lealtad, la compasión, algo que redime y consuela en su obra.
Sin embargo, dice el Profesor en una de sus Cartas: "Algunos críticos han considerado simplista todo el asunto, sencillamente una lucha entre el Bien y el Mal, siendo todo el bien bueno y el mal malo. Perdonables, quizás (aunque por lo menos Boromir ha sido olvidado), en gente apresurada que solo ha leído un fragmento y, por supuesto, sin tener a su disposición las historias élficas, escritas antes, aunque no publicadas.” Carta 154. Te lo cuento en el post Belleza y Subcreación.
Dejo esta pequeña cita sobrecogedora que enmarca la acción con el poema de los Anillos: "Tes Anillos para los Reyes Elfos bajo el cielo. Siete para los Señores Enanos en palacios de piedra. Nueve para los Hombres Mortales condenados a morir. Uno para el Señor Oscuro, sobre el trono oscuro, en la Tierra de Mordor donde se extienden las Sombras." Para gobernarlos a todos..., y atarlos a las tinieblas.
Tienen que estar preparados para luchar por proteger la vida que ellos aman: su vida tranquila y acogedora en la Comarca, cerca de la naturaleza, y su libertad. Y no se rinden: siguen luchando con alma grande, con sacrificio y abnegación, con caballerosidad y honor, por amor, a pesar de que no están seguros del éxito de la misión. Más bien parece un imposible. Y llegan al heroísmo. Siempre con esperanza a pesar de los peligros: una luz que la oscuridad no puede atravesar.
Decía Tolkien: "Los héroes desempeñan siempre un pequeño papel en las grandes hazañas." Seguir y seguir, aun después de sentir que no podían más. Es lo que le ocurre a Frodo. Y lo que le sucedió a él en su vida, después de la muerte de su padre, de su madre, tan joven, de la Gran Guerra, o de la muerte de Edith.
La maldad está concretada en los Espectros del Anillo, ademas de Sauron, el Señor Oscuro. La nada, algo vacío, hueco, retorcido, carente de sustancia propia. Ni vivos ni muertos. Falto de pensamiento y vida independiente. Antiguos Reyes corrompidos por el Anillo... No piensan, ni tienen voluntad propia. Solo obedecen a su amo: Sauron. Y Saruman, otro Istari o Mago con el corazón corrompido por el poder. Desleal, cínico.
El Anillo tiene influencia seductora en quienes lo poseen. Es maligno. Quiere atrapar sus voluntades. El poder, el orgullo, la vanidad, la codicia, el éxito..., el manipular la mente y la voluntad de otros. Y puede afectar al corazón de cualquiera: nadie está exento de dejarse seducir y convertirse en un espectro. La oscuridad y el vacío existencial. De ahí la lucha por el heroísmo si no se quiere caer en la trampa sibilina... Todos sus personajes se tienen que enfrentar al poder seductor del Anillo.
Pero, de nuevo, "por encima de las nubes cabalga el sol".
En la segunda parte de su obra hay un diálogo de Aragorn que habla de esta polaridad. "El mal y el bien no han cambiado desde ayer, ni tienen un sentido para elfos y enanos, y otro para los hombres. Corresponde al hombre discernir entre ellos"...
Y ahí esta Gandalf, el sabio y buen consejero que alienta, ilumina con buenas ideas, atempera corazones, para animar en la lucha cotidiana. A cada uno en su cometido o misión. Le dice a Frodo: si eres tú quien lleva el Anillo, ¡yo te ayudaré!
Tolkien aborda de esta forma maravillosa temas fundamentales de la existencia humana: la misión personal, el amor, la libertad, la amistad y lealtad, el sacrificio... Los que dan sentido a la vida. Refleja la vida misma. Además, cada lector puede captar esta mitología según sus circunstancias, por su variada aplicabilidad personal, como él decía, al pensamiento y a la experiencia de cada uno. Con libertad personal.
Se puede asomar como en un espejo a la Tierra Media y puede ver lo que le transmite con esa luz que arroja sobre la propia vida, y lo que tiene en su corazón.
La vida es una gran aventura que requiere lucha constante por sacar lo mejor de cada uno, pensando en "salvar la Comarca", aunque quizá, no para nosotros...
Al final de su vida, Tolkien estaba absorto en dar vida y coherencia a toda la verdad metafísica que postulaba, y todo el mundo imaginario que había creado para ello desde las palabras. Y su hijo, que nació inmerso en ese ambiente, y disfrutaba con él, siguió con su legado, editando y publicando muchas cosas más, y en concreto su gran obra y más elevada: El Silmarillion. Lo cual le llevó casi 50 años, y se lo agradecemos infinito.
Una cita de La Comunidad del Anillo (El Señor de los Anillos):
"Si deseas saberlo —dijo Gandalf—, te diré que estas puertas se abren hacia afuera. Puedes abrirlas desde dentro empujándolas con las manos. Desde fuera nada las moverá excepto la contraseña indicada. No es posible forzarlas hacia adentro.
—¿Qué vas a hacer entonces? —preguntó Pippin a quien no intimidaban las pobladas cejas del mago.
—Golpear a las puertas con tu cabeza, Peregrin Tuk —dijo Gandalf—. Y si eso no las echa abajo, tendré por lo menos un poco de paz, sin nadie que me haga preguntas estúpidas. Buscaré la contraseña."
"Habla amigo y entra..." en el mundo de J. R. R. Tolkien. Aquí se respira libertad y lucha siempre esperanzada por doquier. ¡Belleza cautivadora! Canciones y poemas hechos de sabiduría arcana, de historias para recordar...
Os dejo otro libro reciente, además de "el mago de las palabras", por si queréis ampliar: "J.R.R. Tolkien: un escritor incomparable", de Luis Daniel González. Y otro reeditado de J.M. Odero, JRR Tolkien y los Cuentos de Hadas, de uno de los expertos pioneros sobre Tolkien.
***
Seguiremos con algunas pinceladas de El Señor de los Anillos...
Continuará...
Espero que te haya gustado, y lo puedes compartir con tus amigos. Muchas gracias.
Mª José Calvo
@Mariajoseopt
optimistas educando
Dejo algunos enlaces relacionados:
URL:
https://optimistaseducando.blogspot.com/2021/03/tolkien-y-su-legado-ii.html
