"1. Tu mujer, la primera y la única
Quiere a tu mujer más que a cualquier otra, también más que a tu madre (no olvides que tu madre es la suegra de tu mujer).
2. Escúchala y compréndela
No pases demasiado tiempo con ella lamentándote del trabajo y del resto de tus ocupaciones.
Más bien, interésate por sus problemas y escúchala.
3. Sorpréndela con detalles
Deja constancia en tu agenda de las fechas clave, en las que agradecerá detalles especiales. Y no sólo esos días: procura también tener detalles especiales cuando no existe más motivo... que ¡expresar tu amor!
4. Mantén en orden tu escala de valores
Convéncete de que el negocio o la empresa más importante de tu vida es tu familia: tu mujer y tus hijos, por este orden.
5. Manifiesta externamente tu cariño
No tengas reparo en decirle que la quieres, aun cuando ya lo sabe, y de demostrárselo con detalles concretos, como el interés por su salud y su trabajo, o sorprendiéndola de vez en cuando con el regalo que casi inconscientemente espera, o con esa escapada por sorpresa que tanto le gustan.
7. Cuídate... porque la quieres
No abandones tu físico y procura la elegancia adecuada en el vestido, en el porte, en las posturas… también cuando estés en casa.
8. Amor se traduce en tiempo
Y el tiempo es, antes que nada, tiempo (la calidad viene después).
Deja constancia de los momentos dedicados a tu familia en la agenda de trabajo. Y procura respetarlos, sin excepción, inflexiblemente.
9. Ella, lo primero siempre
Cuando vuelvas al hogar, empieza por cumplir tus obligaciones con tu mujer (y con tus hijos).
Después, si te queda tiempo, -y es conveniente que te quede- procura leer el periódico, ver la tele o dedicarte a cualquiera de tus asuntos.
Y prescinde del móvil cuando la situación demande una atención exclusiva, ique es prácticamente siempre que estéis a solas!"
* * *
"1. Tu marido es único y vuestro amor es lo primero
Quiérelo por encima de todo... y de todos.
También cuando otro te parezca más comprensivo, más atractivo, más divertido...
Y procura no poner en juego vuestra relación, ni siquiera por cosas importantes.
2. Momentos de tregua
No lo asaltes en cuanto llegue a casa. Ten paciencia. Espera para contarle tus problemas, aun cuando lleves todo el día esperando ese momento.
3. Sé clara y sencilla
No exageres las contrariedades ni finjas un excesivo dolor para inducir a tu marido a hacer lo que quieres.
Dile con sencillez lo que te preocupa, lo que necesitas o lo que te hace ilusión: ambos agradeceréis esa muestra de confianza, que os unirá más todavía.
4. Confía plenamente en él
No lo atormentes con celos ni le ofendas (siquiera verbalmente) con tus dudas. Y no seas irónica.
5. Valora lo mucho que tienes, no lo que "te falta”
No envidies a las otras mujeres ni pongas como ejemplo a sus maridos.
Y haz que tu marido sepa lo afortunada que te sientes, por cosas concretas.
6. La fidelidad "verbal"
Cuidado con las confidencias y los desahogos, sobre todo en momentos de enfado o desencanto.
7. Prepárale su plato favorito cuando creas que lo necesita
8. Cuida tu aspecto externo
Además del desarrollo estrictamente personal y humano.
9. Ten conciencia de tu propia debilidad
Desconfía un poquito de ti misma. Ten en cuenta que las infidelidades comienzan con bastante frecuencia por una amistad sincera con un varón que te comprende y atiende más que tu marido, en la que inicialmente no existe la menor intención de no ser fiel."
¡Gracias profesor por este post tan práctico y útil sobre cómo "ellas", y "ellos", necesitan sentirse queridas, queridos...! Os recomiendo su web: Edufamilia con muchos cursos y recursos. Y uno de sus libros más recientes: "Amar aquí y ahora".
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@mariajoseopt
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