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viernes, 13 de febrero de 2015

APRENDER A AMAR...




                                        APRENDER A AMAR UN POCO MEJOR


                                           

             Este post nace de una película que nos ha gustado: "If only", "Un día inesperado", "Al final de día", un regalo del corazón. 

              


En el amor en pareja estamos acostumbrados a dejarnos llevar de los sentimientos. A poner poca cabeza en ocasiones, a no pensar qué hacer con el tiempo tan valioso que tenemos, enfocándonos en amar de veras a la otra persona, en mejorar la relación y hacerla más fuerte y duradera.

        Hay veces que tenemos que tomar decisiones, y podemos hacer que las cosas que queremos, sucedan. Transformarlas en reales. Por ejemplo, demostrar el cariño





 con detalles de atención, con gestos frecuentes, para que la otra persona se sienta querida realmente: poner intencionalidad en las pequeñas cosas de cada día…




Esto se ve muy bien en un film: “Un día inesperado”, de Gil Junger, con Jennifer Love Hewitt, de la productora Intermedia Films, Outlaw Productions, Love Spell Entertainment. 

Trata de la vida de una pareja muy joven: Ian y Samantha. Se quieren, o se quieren querer… Ella es americana y estudia en Londres. Le gusta la música: toca el violín, y está muy pendiente de él. Es muy detallista. Alegre, extrovertida, creativa y animante… Él, un joven ejecutivo, más centrado en su importante trabajo que en pensar en ella. Por eso a veces es descuidado con los detalles, con las fechas, con las cosas importantes para ella. Tampoco sabe expresar los sentimientos, y es poco empático.

Un día, paseando juntos, él ensaya un discurso… y dice que quiere cambiar el mundo. Ella le responde que todo esta fuera de control: lo único que controlamos son nuestras propias decisiones… Lo “deja caer”, sin saber la repercusión que tendrá en él, pero le hace pensar.



Posteriormente él tiene un encuentro “casual” con un taxista, que sabe mucho de asuntos del corazón, y misteriosamente también de él…  Le despide con un: “ámela mucho”, “¡dese prisa!, no le queda tiempo...”



Entonces le sucede algo totalmente inesperado, y le causa una conmoción interior. Eso le permite reflexionar sobre qué es lo importante en su vida. Le ayuda a mirar la realidad con otros ojos, a sorprenderse con las cosas valiosas, a valorar lo que tiene, en especial a ella, y a pensar en sus propias decisiones. E intenta demostrarle el cariño, con hechos muy concretos, para que ella lo perciba.






Sigue la vida, y se esfuerza en poner a ella en el centro de sus aspiraciones, de sus intereses, y de su corazón. Dedicarle su valioso tiempo.


Hacen una escapada de Londres, a un pueblecito de la montaña donde nació él, y ascienden a un monte lleno de recuerdos. Llueve torrencialmente, y encuentran un lugar donde refugiarse. Hablan de muchas cosas, de su pasado... Ella le ayuda a contar lo que lleva en su corazón pero que no se atreve ni a pensar...


            Más tarde le pregunta a ella qué le gustaría hacer si supiera que era su último día de vida... Quiere conocer sus gustos, intereses, anhelos, para complacerla.



Vuelven a la ciudad, y la lleva a su recital musical de graduación, que tantos años lleva esperando, con sorpresa incluida, muy bien pensada y planeada.


Van a celebrarlo, y ella le da las gracias por “un día inesperado”… Él le dice que le regala su corazón… 

Cuando intentan volver a casa, bajo una fuerte lluvia, y sin paraguas, hay una conversación preciosa. Él le quiere explicar por qué le ama:


“Hoy, gracias a ti, cada decisión que he tomado ha sido diferente, y mi vida ha cambiado por completo. Si lo haces así, vives al máximo. No importa si te quedan cinco minutos o cincuenta años…" "De no ser por ti, nunca hubiera sabido lo que es el amor. Gracias por ser la persona que me ha enseñado a amar y a ser amado…” 



         Esta película nos puede ayudar a pensar cómo vivimos el amor. Si somos conscientes de lo que significa de veras, si ponemos a la otra persona en primer término, y queremos su bien, o es el "yo", tan narcisista muchas veces, el que ocupa el corazón y el tiempo..., si fantasea y no demuestra el cariño a la otra persona.


              
Dejo un pequeño corte de la película:



                                                 



Se ve de forma muy gráfica que la libertad de la persona se construye a través de sus propios actos. Y es algo dinámico, que aumenta o disminuye según el uso que se hace de ella. Por un lado es un regalo que se nos ha dado, y por otro es una tarea por hacer y construir día a día que va perfilando nuestro camino.


          Cada decisión es vital, porque va conformando la vida, "a golpes de libertad" que diría Ortega, y va modelando la personalidad. La libertad alcanza su mayor despliegue cuando uno es capaz de amar de veras.






Por eso, quien ama se siente libre. El último fin de la libertad, el “paraqué”, es el amor. En él se hace más diáfano lo que de verdad somos y queremos.


es el amor el que nos libera de la mayor “cadena” que podemos tener: las ligaduras sutiles del propio "yo"… que a veces nos impiden pensar en el otro, querer al otro, y plasmarlo en mil gestos y detalles, y de mil formas y modos… El amor es creativo. Y como dice un refrán castellano, “obras son amores y no buenas razones”. 


          El sí inicial de la Boda ayuda a vivir "en-amor-dados". Es decir, a entregarnos, y descubrir y suscitar lo mejor de la otra persona, a la que queremos querer con un amor auténtico. Y ese descubrir y fomentar lo mejor de ella sólo se consigue a la luz del cariño. De ese modo, ayudarle a lograr su mejor versión, su plenitud como persona.


       
         

           
               
               Nos quedamos de esta película con que lo más valioso de las personas es su tiempo... para amar. Con un "¡Ámela mucho!"...

                   
             Porque el amor, no solo es sentimiento, sino una decisión de querer-querer a lo largo de los días... Un acto consciente y deliberado, bien planeado, que se va concretando día a día en mil detalles y delicadezas de enamorados. 

         
          
             Podemos pensar cómo vivimos el amor. Si somos conscientes de lo que significa de veras, si ponemos a la otra persona en primer término, buscando su bien, o, es el "yo" que siempre surge, el que ocupa todo el corazón... Amar es "dejarle ser...", facilitar el amor.








  Espero que te haya gustado, y dejo algunos enlaces relacionados:

       * Comunicar-el-amor 


        *Nuestro-mejor-proyecto (amor de pareja)

        *Para amar mejor...

        Amistad-en-pareja 

       

                                        
       



                                                                                      Mª José Calvo
                                                                                  optimistaseducando
                                                                                     @Mariajoseopt  
             


URL del post:
https://optimistaseducando.blogspot.com/2015/02/aprender-amar.html

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